EL GRAN MINÚSCULO

¿Nunca os habéis preguntado cómo es el mundo visto desde los ojos de un insecto? 
¿No se os ha ocurrido jamás el imaginaros volando como una mosca? 
¿Qué opináis respecto el carácter de los mosquitos, os gustan?
Pues si alguna de las anteriores preguntas os ha hecho reflexionar, ya es hora de presentaros el pequeño gran mundo de Minuscule.

El gran praderío de verdes brotes y frondosos árboles que queda al lado de tu casa puede ser el hogar de cientos de miles de minúsculas criaturas que pueblan las bajas hierbas: los bichos. Orugas, saltamontes, hormigas y arañas que, desde diversos puntos de la foresta, te vigilan y viven en secreto entre las piedras del camino o las grietas de tu muro... pero ni te imaginas la vida secreta que ellos tienen ahí, la vida privada de los insectos.
Así es el slogan de la divertida y peculiar serie televisiva que yo disfruté con ímpetu en mi infancia y aún hoy en día me hace reír ocasionalmente. Su nombre es Minuscule, y es una creación de la pareja francesa compuesta por Hélène Giraud y Thomas Szabo que ha ido arrasando paulatinamente en las pequeñas pantallas hasta el punto de darles crédito a la creación de una película en el año 2012: Minuscule y el valle de las hormigas perdidas que, por cierto, os recomiendo.
Los argumentos de los episodios son independientes y tratan de reflejar desde un humor muy particular las dificultades de ciertos aspectos humanos en la vida de los propios insectos que cada día nos rodean y, a su vez, participan involuntariamente en nuestra monotonía. En este pequeño mundo que crean en un pueblo de la campiña francesa contemporánea, mariquitas chinchonas, abejas moteras, mariposas con el sentido del tiempo alterado y cigarras de voz mal sonada dejan un escenario de risas y más de una sensación de identificación con los mismos.
Y ahora la explicación a que me acordara de esto así y decidiera hacer una entrada: el trabajo del spot que precede a esto lleva parte de la sintonía que inaugura cada capítulo (de Herve Lavandier, que me gusta bastante), por lo que consideré oportuno el ovacionar esta mítica y querida serie que tan brillante y original encuentro.
Para terminar, aquí quedan algunos de mis momentos favoritos.
Espero que os arranquen alguna risotada, Bananatas, o que, por lo menos, os maravilléis con su calidad! 


 











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